En las últimas décadas la cantidad de desecho que se produce a nivel mundial se ha incrementado. Los expertos coinciden con que se produce alrededor de 2.100 millones de basura a nivel global y que tan solo un 15% de esta es reciclada y tratada correctamente, el resto termina en rellenos sanitarios, vertederos a cielo abierto, arroyos, espacios públicos o abandonados.
La mayor parte de la basura está constituida por papel, cartón, vidrio, plástico, metales, caucho, ropa, madera, aparatos eléctricos, desechos hospitalarios y de construcción, entre otros. Cabe señalar que América Latina y el Caribe ocupan la región —sobre todo en esta última parte— en donde menos se pone en práctica el reciclaje y el sector encargado de dicha actividad suele ser informal. Se cree que cada habitante genera un kilo de basura por día, al menos en nuestro continente. No olvidemos que la producción de basura está estrechamente vinculada con la contaminación del aire, mares y ríos, el aumento de enfermedades respiratorias, con inundaciones e incendios, el calentamiento global, etcétera.
EE.UU., Canadá, Países Bajos, Chile, Brasil, República Dominicana, Argentina, entre otros, figuran entre los países que más basura generan. También se ha determinado que existe una relación entre la cantidad de ingresos que reciben los habitantes de cada país y la producción de basura —a mayor ganancia, mayor consumo y mayor producción de desechos—.
Según el Ministerio del Ambiente, en el Perú existen tan solo 34 rellenos sanitarios, pero se requieren 270 de estos para que la basura tenga un mejor destino. Recordemos que un relleno sanitario es una infraestructura que tiene la capacidad de albergar la basura de manera segura para la salud y el medio ambiente. En el caso de Lima hay tan solo 5 rellenos sanitarios ubicados en Carabayllo, Lurín, Huaycoloro, Cañete y Ventanilla y más de 150 botaderos desperdigados por toda la ciudad, los cuales son espacios ilegales no condicionados para la disposición de desechos y residuos que generan focos infecciosos y tienen un impacto sumamente negativo tanto para las personas como para el medio ambiente. A esta problemática hay que sumarle el escaso número de plantas procesadoras de basura que existen en Lima.
En Emaús Perú consideramos que para contrarrestar el problema de la basura podemos adoptar desde casa pequeñas medidas como lo son: practicar las 3R (reducir, reutilizar, reciclar), disminuir la compra de bebidas embotelladas, usar bolsas de tela, donar a organizaciones benéficas aquellos artículos que se encuentran en desuso, reducir la basura que se genera a partir del consumo de ciertos alimentos y aprovechar las sobras para generar composta, no arrojar basura en espacios públicos ni en cuerpos de agua, botar los desechos de manera correcta y comprar de manera consciente.